En relación con el uso de las formas átonas del pronombre personal de tercera persona LO, LA, LE y sus plurales LOS, LAS, LES, la Academia Española, teniendo en cuenta el origen etimológico de estas formas y la práctica más autorizada entre los escritores modernos, recomienda para el uso culto y literario la siguiente norma general:

LO: para el acusativo (complemento directo) masculino.
LA: para el acusativo (complemento directo) femenino.
LE: para el dativo (complemento indirecto) de ambos géneros, y también para el acusativo (complemento directo) masculino de persona.
LOS: para el acusativo masculino plural.
LAS: para el acusativo femenino plural.
LES: para el dativo plural de ambos géneros.

  Se incurre en LOÍSMO cuando se emplea LO/LOS para el dativo masculino, en lugar de LE/LES: Los ha comprado zapatos nuevos, en lugar de Les ha comprado zapatos nuevos, que sería lo correcto.

  Se incurre en LAÍSMO cuando se emplea LA/LAS para el dativo femenino, en lugar de LE/LES: He visto a María. La he dicho que no me llame, en lugar de Le he dicho que no me llame, que sería lo correcto.

  En cuanto al LEÍSMO, que consiste en el empleo de LE/LES para el acusativo de ambos géneros, en lugar de las formas LO/LOS para el masculino y LA/LAS para el femenino, hay que señalar que es incorrecto cuando el pronombre se refiere a un nombre femenino, tanto de persona como de cosa, o a un nombre masculino de cosa. Pero está admitido cuando se refiere a un nombre masculino de persona en singular. Así pues, tratándose de un hombre podemos decir indistintamente No LO conozco o No LE conozco; pero si se trata de una mujer, solo podemos decir No LA conozco, y, hablando de un libro, No LO conozco.